Los edificios que son considerados Patrimonio Cultural al ser intervenidos por deterioros, deberán contar con mano de obra dentro de las esferas de la conservación-restauración. El equipo de trabajo diseñará las mejores alternativas para la solución de la problemática, de acuerdo a normas internacionales y «modus operandi» aconsejados por los organismos dedicados a tal fin.
Felizmente se abrió la conciencia a la necesidad de documentar fotográficamente las obras, otorgando parte del presupuesto a la documentación, atentos a las mezquindades del pasado ya que se hicieron obras importantes que no fueron, o fueron deficientemente fotografiadas.
Otilio Moralejo se especializó en la documentación fotográfica de Edificios en Restauración. El proceso consta de tres etapas: previa, otra durante los trabajos y la tercera cuando concluyen las tareas de restauración.
Documentó las obras realizadas en la Iglesia del Pilar, Basílica de la Merced, Salón Dorado del Teatro Cervantes, Cúpula de la Parroquia Inmaculada Concepción (Redonda de Belgrano), Hall de ingreso al Museo de la Ciudad, Casa de Pastoral Universitaria, y otros edificios declarados de interés cultural.